La clarísima falta de Felipe Reyes en la última penetración de Nelson fue el último ejemplo de sus errores, siempre beneficiando al conjunto local. El gesto del ala-pívot internacional es tan exagerado, tan descaradamente deliberado, que caben pocas dudas de que los árbitros la vieron y no se atrevieron a pitarla.
Arbitraje aparte, el Gran Canaria no ganó porque su ataque en el segundo tiempo fue poco fluido, espeso, y cedió demasiados tiros libres y penetraciones. No supo parar a Llull (10 puntos en el tercer cuarto y la canasta ganadora) ni encontrar a Carroll -defendido cara a cara durante todo el último cuarto- y acabó cediendo poco a poco ante un Real Madrid a un nivel muy inferior que el que vimos entre semana en la Euroliga.
De nuevo se sucedieron las malas decisiones de Green en instantes decisivos. Otra vez vimos tiros con mucho margen de posesión, abuso del bote y del 2x2 sin sacar ventajas claras y triples desde 8 metros como única solución final. Pese a eso, y a que su defensa al final tampoco fue lo intensa que estaba siendo en el primer tiempo, jugó el último cuarto completo, una opción poco habitual últimamente, ya que Pedro Martínez parecía confiar mucho más en el rendimiento de Bellas en los últimos tramos de encuentro.
Unos leves apuntes tácticos
Me parecen interesantes otras dos cuestiones técnico-tácticas. La que más me llamó la atención fue que en los cambios defensa/ataque, en los que Bramos juega en lugar de Jaycee, los técnicos del Gran Canaria sacaron a Borovnjak para defender en lugar de a Xavi Rey. Pedro Martínez ya había comentado en una rueda de prensa anterior que el serbio ayuda mucho en la defensa del 2x2, esa situación en la que tantas veces he comentado que Rey tiene mucho que mejorar (aunque, todo sea dicho, hoy lo hizo mucho mejor que habitualmente).
La segunda es lo bien que salió de la presión, parece que con jugada preparada, el Gran Canaria en el último minuto. Tras unos primeros segundos de duda de Green, presionado por Llull, el Granca sacó de banda y llego con decisión y pocos botes al aro madridista, donde Borovnjak sacó una falta. Por cierto, tal como comentó Manel Comas, con un poco más de fuerza en lugar de buscar el aro pasado, podía haber sido 2+1.
Y la tercera, que comentaré después, es la alegría con que jugó el Gran Canaria durante todo el primer tiempo. Ya vimos contra el Bilbao que Pedro Martínez pedía correr; y ya lo había avisado el técnico cuando las bajas en el juego interior mermaban la capacidad cerca del aro. Asun así, me sorprendió positivamente la búsqueda del contraataque siempre que hubiera opción y las ganas de anotar con rapidez.
El Madrid de hoy frente al del martes y jueves
Sin duda, el durísmo enfrentamiento contra el Valencia despistó a los blancos. Desconcentrados y sin tensión al inicio, cuando se pudieron a defender con dureza mejoraron mucho su rendimiento. Con algún rebote ofensivo, alguna canasta de Tucker -que siempre que pudo atacó a Carroll, consciente de su ventaja- y la decisiva aportación de Llull, el Real Madrid hizo lo justo para ganar.
Quizá por primera vez ha sido evidente cuán importante es la baja de Sergio Rodríguez para los de Lele Molin. El base canario es el único capaz de salirse del guión, de inventar algo fuera de sistema, como recordó en la Copa del Rey. El "balones a Llull y aclarado para que penetre" que presidió todo el ataque madridista en los dos últimos cuartos es un recurso de equipo limitado y pobre y da muy mala imagen del conjunto merengue y de su cuerpo técnico.
De hecho, hay una cuestión constante en el Real Madrid esta temporada que no acabo de entender: la nula búsqueda de los interiores de espaldas en los finales de partidos. Siempre empiezan los encuentros orientando mucho el ataque hacia el poste bajo, donde Felipe y Tomic suelen hacer dañlo (hoy, en el primer tiempo, sin ir más lejos, fueron los más destacados). Pero luego van quedándose en el juego exterior y sólo alimentan a los grandes cerca del aro en balones doblados o en situaciones muy concretas.
Con la variedad que tienen en la plantilla, me parece un error, pero no tengo claro de si es una decisión del banquillo o un problema de los jugadores.
Lo peor
- La falta de instinto asesino del Gran Canaria para matar el partido cuando lo tenía controlado. Estaba jugando muy bien en el primer tiempo y empezó serio tras el descanso, pero no supo defender las penetraciones de Llull ni mantener la fluidez en ata que y lo acabó pagando. Es el Madrid, con todos los kilos centímetros y atleticismo que tiene su plantilla, pero se veía que su mente hoy no estaba centrada. Por eso creo que es una oportunidad perdida que lamentar.
- Relacionado con el punto anterior: al Gran Canaria le faltó saber jugar con las faltas, una vez más. El Madrid llegó a los instantes finales del tercer y del último cuarto sin las cuatro personales, en gran parte porque los amarillos dejaron de atacar con agresividad y tiraron demasiado desde media y larga distancia. Al mismo tiempo, cedieron muchísimos tiros libres, ya que a 7 minutos del final el Madrid ya había entrado en el bonus. El desequilibrio en tiros libres (28-9) no hay que buscarlo en el sospechoso arbitraje, porque es un problema que el Gran Canaria arrastra desde hace tiempo, incluso más allá de esta temporada. El propio Pedro Martínez lamentó esa diferencia en la rueda de prensa tras el partido.
- El arbitraje. Mira que no me gusta escribir mucho sobre ello, pero en un final de partido apretado, la cobardía mostrada tiene que ser puesta en evidencia. Además, ya venía notando cierta tendenciosidad en las decisiones desde el tercer cuarto, que ayudaron al Madrid a meterse en el partido.
- El partido de Green, siempre anteponiendo sus opciones de tiro a las del equipo. Habrá quien piense que le tengo manía -y puede que algo de mi inquina a los bases que tiran tanto se refleje-, pero de nuevo me pareció que tomaba malas decisiones una tras otra. Su principal opción para terminar un ataque cuando quedan 10 segundos y tiene el balón siempre es un tiro propio, sin importarle estar acertado o no. Su nivel de juego no es tan alto como para condicionar el ataque del Gran Canaria de la manera en que lo hace. Me sorprendió leer en una entrevista que le hicieron esta semana que estaba siendo un buen año para él porque está "consiguiendo tiros" para sus compañeros. Lo que me pregunto es si Pedro Martínez piensa igual.
- La citada previsibilidad del Madrid, que volvió a ser el equipo corajudo que gana a base de casta y renuncia al juego elaborado. Con este nivel, el Valencia se lo merendará sin compasión la semana que viene. Aunque imagino que el principal motivo de que estuvieran hoy mal fue que pensaban en la Euroliga, precisamente.
Lo mejor
- El juego del Gran Canaria en la primera mitad. Con la defensa muy centrada y muchas ganas de correr, cosa que pudieron hacer gracias al absoluto control del rebote en aro propio (14 rechaces defensivos por ningún rebote en ataque del Madrid). Se vieron, en mi opinión, los mejores minutos de juego a domicilio, con valentía y mucha puntería en el tiro.
- El nivel que apunta el recuperado juego interior. Aunque no fue lo mejor del partido, con Nelson y Wallace recuperados de sus molestias, Borovnjak integrado y Rey ya a pleno rendimiento (hizo mucho daño hoy en el rebote ofensivo), el Gran Canaria parece que dispondrá de unos pívots de garantía para afrontar la parte decisiva de la liga, por alargada que sea la robusta sombra de Savané. Esperemos que no haya recaídas.
- La aportación colectiva. La capacidad de aportar en ataque por parte de todos los jugadores es un factor decisivo para el Gran Canaria, pese a que con el avance del encuentro este factor fue diluyéndose junto al rendimiento del equipo. Todos los jugadores anotaron al menos 3puntos, pero en el último cuarto únicamente anotaron -casi diría que tiraron- Wallace, Green -con el mal resultado citado- y Carroll (más un tiro libre de Borovnjak).
- La imagen de equipo unido que desprende el Gran Canaria cada jornada. Ver a Savané tan implicado en los tiempos muertos, viajando lesionado con el equipo (muy pocos jugadores lo hacen); observar las reacciones y el comportamiento de Wallace en la cancha (y en los entrenos) y contemplar a Nelson siendo el centro del baile antes del partido ayuda a entender dicha unión y el ambiente optimista y positivo que refleja el equipo. Sin duda, es algo que ayuda a que rinda por encima de sus posibilidades cada año.
El Gran Canaria estuvo muy cerca de ganar donde nadie lo ha hecho este año (aunque todavía no han jugado allí Barcelona ni Baskonia), pero no por esperada duele menos la derrota. A ver si se me pasa el cabreo, porque de momento el resumen de acbtv no hace sino aumentarlo, con su desapasionado "el norteamericano reclamó una falta" como comentario de la última jugada:
5 comentarios:
¿Para que pagar un abono? ¿Para que blog de calidad como este?¿para que se invierte dinero publico en la promocion de la principal actividad economica de una isla? ¿Para que esta mentira tan grande que es la liga ACB?
PD: Soy el ganador de la entrada que el club ponia en juego en facebook!
Dicho todo lo dicho sobre el lamentable arbitraje, no sé que explicación tendrá Pedro para los miseros 10 minutos que le dio a Tomás, teniendo en cuenta además, el de nuevo lamentable partido de Green. Tampoco entendí que hacia Dejan en cancha los tres últimos minutos, teniendo a Rey en el banco.
Por último, lanzo una pregunta. Suponiendo que los arbritos hayan visto de nuevo por tv el hachazo de Felipe, ¿ qué mierda pasará por su cabeza? ¿ Cómo justifica García Ortiz ante su prole tal decisión?
El Madrid, una bacalá infame. Un equipo con Tucker y Fischer como extracas, jamás podrá ganar un título.
@On Off, ¡felicidades por el premio! El robo nos hace hervir la sangre a todos, pero la verdad es que pasa en todos los ámbitos del deporte de equipo. Incluso en la NBA, aunque se hable menos de ello.
@colegio galicia, creo que Borovjnak entraba para defender, básicamente, como escribo en el post.
Lo de Green no lo entiendo, con Bellas en cancha había mejorado claramente el marcador a favor del Gran Canaria (excepto en su breve aparición en el tercer cuarto).
Y no estoy muy de acuerdo con lo del Madrid. Está claro que jugó mal, pero ni los extracomunitarios tienen la importancia de antaño ni creo que estén mal elegidos.
Con Tucker querían un tirador y lo tienen; otra cosa es que sea de rachas. Con Fisher querían un grande intimidador y eso lo cumple. La capacidad de anotación global ya la pone Llull y la clase cerca, Tomic.
Que generalmente no juega bien -o que lo hace peor que muchos equipos ACB- es verdad, pero también lo es que está mucho mejor en ACB que en los últimos 3 años (si no me equivoco) y que está compitiendo para jugar la Final Four.
De hecho, como escribo en la entrada, no se le puede juzgar por este partido cuando está en medio de la eliminatoria más importante del año. Y contra el Valencia estuvo a mejor nivel en los dos encuentros, aunque perdiera el segundo.
Pues por eso no me gustan ni Madrid ni Barcelona. ES vomitivo.
Publicar un comentario