lunes, febrero 12, 2007

El Dunas Hotels Gran Canaria, de mal en peor, ya es último

El filial del Gran Canaria en la EBA ya es último. La poco habitual racha de inicio se vio truncada. Desde que Joel Freeland empezó a jugar con 'los grandes' y no aporta sus casi 25 puntos y 9 rebotes (con 28 de valoración) de promedio, no ha vuelto a ganar.

Los que más suman estadísticamente son los mismos del año pasado -salvando al joven y 'drafteado' inglés, que desde que Savané se restableció está relegado nuevamente al banquillo en la ACB- y casi diría que en el año anterior. Enrique Ruiz (12,2 puntos y 6 rebotes por partido) y Añaterve Cruz (15,5 puntos, 3,8 rebotes), con la ayuda este año del checo Jaromir Fohler (10 puntos, 6,3 rebotes).

Reconozco que soy pesimista con el sistema empleado por el Gran Canaria para afrontar la liga EBA con su filial. El hecho mismo de que Freeland llegara a jugar dice muy poco de la planificación (estoy seguro de que ellos no lo preveían así) de la temporada. Y además el base islandés Axel Vilhjamsson se marcho porque, al parece, le habían prometido entrenamientos con el equipo ACB. A los malos resultados hay que sumar la errática trayectoria directiva, la cantidad de extranjeros que aportan poco o nada y la edad de sus puntales (22 o 21 años), justo en el límite para quedarse en el club conn las condiciones actuales.

El riesgo de descenso es real, pero habría que ver si preocupa de verdad, porque en esta situación el Gran Canaria se podría plantear foguear a sus promesas en otras ligas y otros equipos canarios de esta liga.
Sin embargo, no todo es malo. No vamos a buscar ersutlados por encima de desarrollo en un equipo filial. Y este año hay varios jugadores jóvenes que están teniendo minutos:
Es cierto que Hernández y Víctor Santana son menos conocidos y que han jugado muy poco, pero es de esperar que sigan contando para el entrenador...o entonces sí que habrá que preguntarse quién toma las decisiones y por qué en el filial.

NOTA: Advierto que sólo veo las estadísticas, nunca veo al equipo, y que es una maner de juzgar extremadamente incompleta y parcial, en la que vale lo mismo una canasta cuando el partido está decidido que en los momentos comprometidos.

No pudo ser, pero tampoco lo esperábamos

No pudo ser. El Gran Canaria perdió contra el Real Madrid, que luego fue finalista, en la Copa del Rey. Casi nadie lo esperaba -ni TVE, que emitió un anuncio sobre el Tau-Real Madrid antes de jugarse el partido, así que la decepción es menor, por lo que parece. De hecho, se nota cierto clima de conformismo tras la actuación del equipo amarillo.

Yo me niego a considerarlo positivo. Por mucho que se mire, el Gran Canaria perdió una oportunidad inigualable. Si hace dos años contra el Tau los árbitros ayudaron a que los vitorianos pasaran, en esta ocasión fueron los desaciertos propios los principales motivos. Y hasta que el Gran Canaria no gane un partido de esos, no tendrá una actuación digna; lo que no quiere decir que llegar sea un logro. Vale, es de mérito estar entre los ocho primeros tras la primera vuelta (aunque yo bien lo cambiaba por estarlo al final de la liga regular); pero perder en el primer partido, sea por uno o por 17, no es hacer un buen torneo.

Ahora llega el FMP Zeleznik, que, si vuelve a imperar la lógica, dejará al Gran Canaria fuera de la Copa ULEB.

[Por cierto, la nota de EFE recogida en ACB.com es un disparate, como que el talentoso ala-pívot Zoran Erceg es uno de los especialistas en el tiro de perímetro que más sobresale. Por cierto, si el Gran Canaria hace un largo viaje, el FMP Zeleznik juega dos días después de ganar (y celebrar, esperemos) la Copa de su país.]

Y así los de Maldonado se centrarán en la ACB, donde hasta ahora van entiendo un papel digno. Que siga así.

lunes, febrero 05, 2007

Emocionante triunfo del Gran Canaria ante el Barcelona

El Gran Canaria se llevó el triunfo ante el Barcelona en el CID (80-70) gracias a su buena defensa, el acierto en la prórroga y el ánimo del público, que estará un mes entero sin volver a ver a su equipo en la ACB, pues la visita del Granada será el 3 de marzo.

Pese al revuelo que se ha armado y la algarabía general, el partido fue uno de esos llenos de desaciertos y falta de tino, defensas duras, muchas decisiones arbirtales discutidas y poco talento. Que Mario Fernández sea tan alabado por capturar nueve rebotes es sintomático: se premia al esfuerzo y concentración, no al acierto, al talento (2/6 en tiros de campo y 5/8 en tiros libres) o a la capacidad de dirigir al equipo (dos asistencias y dos pérdidas).

Siempre que se le gana al Barcelona, y más tras un partido igualado, se destaca más en los medios de comunicación; también influye que el Barcelona llevaba una racha de cinco victoria consecutivas. Es el riesgo de las estadísticas descontextualizadas: de esas cinco victorias, sólo se puede considerar meritoria la de la jornada anterior, ante el Pamesa en Valencia. Y, con todo, no hay que olvidar que en la Liga Europea había perdido un par de encuentros seguidos -luego volvió a ganar- y que su juego sigue siendo monótono, espeso y predecible.

Ivanovic ha convertido al Barcelona en un equipo sin espíritu, sin juego de equipo, cuya principal arma, el talento de Navarro, no puede aflorar de manera continua y sin el cual se fía todo a las temerarias decisiones de Lakovic (que tuvo un -8 de valoración, con 0/7 en triples, 0/3 en tiros de 2 y tres pérdidas de balón) y al tiro de Basile. Intentan casi siempre el 2x2 para acabar con tiro abierto de Vázquez o Marconato, ya no se practican otras jugadas (posteo de De la Fuente ante superioridad física, triple de Kakiouzis en las esquinas) ni hay juego interior. Un mar de dudas, por mucho que los resultados, en esta última, hayan acompañado, gracias a que Navarro es el mejor talento ofensivo de Europa.

Lo mejor
  1. La defensa colectiva del Gran Canaria, que recuperó su intensidad. Maldonado había dicho que los especialistas habían bajado el listón (para mí que se refiere a Guerra y Savané sobre todo); en este caso, Moran, los bases y el propio Guerra estuvieron muy bien, pero es que los demás nunca desentonaron. Me pareció la mejor defensa en mucho tiempo, siempre en individual, con ayudas de los interiores en el 2x2 muy afinadas en tiempo y forma y muy atentos sobre Navarro (que tiró menos de lo habitual gracias a ello).
  2. El acierto en el tiro exterior (10 de 23 en triples) y la garra para el rebote ofensivo (15, por 7 del Barcelona), poco habituales para el 'Granca'.
  3. La intensidad y serenidad de Mario Bruno Fernández. Son dos cualidades que siempre muestra -quizá algo menos la intensidad en los últimos partidos-, pero Lakovic se quedará con su recuerdo mucho tiempo. Aún no hace jugar lo que debería ni toma las suficientes responsabilidades cara al aro, pero ayuda como ningún alero en el rebote de ataque y en ls ayudas defensivas.
  4. La valentía de Hunter. Había hecho un partido gris y en la prórroga, con un triple y un tiro de cuatro metros saliendo de bloqueo, puso la puntilla al Barça. También quiero destacar el nivel de Sergio Pérez. Lo nombro ahora, pero lleva ya un par de partidos más participativo, con más puntería en los triples y mucho mejor en defensa. Él mismo había reconocido que estaba siendo un año mediocre y lo está remontando.
  5. El público. Animó mucho, chilló a los árbitros aunque tomaron decisiones muy protestadas por los blaugranas y casi, casi no hubo quejas cuando Norris perdió dos balones.
Lo peor
  1. La poca participación y falta de acierto de Moran y Guerra en ataque.
  2. La falta de dirección para buscar a Savané cuando estaba haciendo daño. Y la falta de acierto del propio Savané, que todavía no ha cogido el punto en la media vuelta y se atreve menos de lo que debería.
  3. El juego a tirones y dependiente de Hunter y Vroman en 1x1, sin penetraciones continuadas por los pívots, poco juego de espaldas, cortes ni puertas atrás.