Balance de la pretemporada del Gran Canaria

Con el encuentro ante el renovado Cajasol en preparación -el domingo a las 11.30 horas; yo no lo veré, así que no escribiré sobre él-, es bueno momento para hacer balance y evaluar cómo ha ido la pretemporada y con qué grado de preparación llega el Gran Canaria a su decimotercera (esperemos que no sea gafe) temporada consecutiva en la ACB.

Después de haber visto tres partidos contra el Tenerife (final de la Copa Gobierno de Canarias y encuentros de la Copa Toyota) y la presentación oficial contra el PAOK de Salónica, y aun teniendo en cuenta que el nivel de estos equipos es bastante inferior de los conjunto de la zona media de la ACB, mi opinión es positiva.

Que sigan nueve jugadores de la temporada anterior y el entrenador después de la mejor temporada del Gran Canaria en la ACB (si no por puesto, sí por posibilidades reales de llegar a las semifinales) es algo lógico. Además, hace posible que se solventen las carencias tácticas y físicas en la pretemporada y ayudan a que el equipo arranque con buena base, lo cual me parece especialmente provechoso para sumar todas las victorias posibles en las primeras jornadas.

Desmenuzando las actuaciones individuales, y sin querer darle mucha importancia, han destacado sobre los demás Carl English, al que no se le conocía, y Savané, muy por encima del nivel exhibido la temporada pasada. También Sergio Pérez, Marcus Norris y Kornel David han comenzado muy centrados y con acierto. Más irregular ha estado Roberto Guerra, aunque contra el Tenerife demostró que está varios escalones por encima de los escoltas y aleros de la LEB...sin contar a Barbour.

Freeland deberá esperar ua oportunidad o mejorar muchísimo su actitud en defensa, aunque se ha fortalecido bastante y es capaz de aprovechar sus ventajas al poste en ataque. Baldo continúa mostrando su inconmesurable espíritu de lucha, pero el desatino en el tiro le quita versatilidad. A Mario Bruno Fernández lo he visto muy flojito y sin la decisión en ataque que necesita para crecer como jugador. Massie, aunque es todavía una incógnita, me gustó por su sobriedad e inteligencia para aprovechar su físico frente al PAOK.

Tácticamente, el Gran Canaria no ha mostrado casi nada nuevo. Los ataques se siguen basando en los continuos 2x2 entre aleros y pívots, con algún recurso buscando al tirador saliendo de bloqueos, especialmente cuando está English en cancha. Los saques de banda y también continúan basándose en las pantallas con hasta tres jugadores bloqueando al base; en los saques de fondo se buscan las mismas alternativas (alero al poste bajo aprovechando el corte o bien base o pívot fuera de los 6,25). La única defensa zonal que he visto, la que planteó el PAOK en el tercer cuarto (si no me equivoco), se atragantó un poco y sólo al cuarto o quinto intentó se atacó bien con Baldo ocupando el poste alto de la zona.

En defensa aún no se ha mostrado variedad. No recuerdo ninguna zona ni ninguna presión; quizá Maldonado considera este punto muy importante a estar alturas; o, dado que se practica desde hace dos años, el aprendizaje está adelantado. En los 2x2, los pívots siguen haciendo una ayuda rápida (eso que se denomina flash defensivo, que tan bien lo atacaba el Joventut la temporada pasada) para recuperar a su par en cuanto pueden, y los 1x1 de espaldas al aro no suelen defenderse con ayudas; si acaso, con intentos de tapón del otro pívot. Esta falta de innovaciones es comprensible dado el buen nivel defensivo que muestran casi todos los jugadores, incluyendo a un Carl English que contra el PAOK volvió a acallar las incipientes críticas a su mala defensa con tres robos de balón y posteriores canastas.