domingo, enero 15, 2012

El Granca recupera el acierto en el triple para derrotar a un flojo Estudiantes

Óscar Alvarado bota el balón durante el encuentro. Fue uno de los mejores. ACB PHOTO
El Gran Canaria volvió a ganar tras tres derrotas consecutivas imponiéndose al Estudiantes con más comodidad de la que refleja el marcador final (73-65). Los insulares aprovecharon su acierto en el triple, sobre todo en el primer tiempo, y la chispa con que dotó al juego de ataque la presencia de Óscar Alvarado en su vuelta al CID.

Las tres veces que el Granca ha pasado del 36% en triples se ha llevado la victoria de manera clara: contra Obradoiro, Valladolid y Estudiantes. Este dato pone de relieve la importancia de la puntería para el conjunto amarillo, que volvió a lanzar más de tres (12/31) que de dos (16/28). El movimiento de balón fue fluido por momentos, la defensa se mantuvo a buen nivel y durante algunas fases, el equipo corrió con una alegría poco vista esta temporada.

La ventaja de 8 puntos, como digo, no sirve para constatar la superioridad amarilla durante buena parte del encuentro, debido a la remontada en el último cuarto del Estudiantes. Después de que el Gran Canaria se despegó en el segundo cuarto, coincidiendo con la entrada a cancha de Óscar Alvarado, el equipo supo administrar bien la renta en el tercer periodo.

Pero en el último cuarto empezó a encontrarse dificultades en ataque, se olvidó de correr en su afán por mantener la ventaja y aflojó por momentos en la defensa. En los últimos 3 minutos, con dos bases en cancha, más que controlar el ritmo el Gran Canaria dejó de atacar, paró la circulación de balón y contemporizó. El resultado no fue peor porque tampoco el Estudiante forzó la situación, pero el ejemplo debería servir para posteriores ocasiones.

Apuntes tácticos
Como era de esperar en un enfrentamiento entre equipos dirigidos por Pedro Martínez y Pepu Hernández, el encuentro estuvo plagado de matices tácticos interesantes. El más evidente son las defensas zonales. El Gran Canaria ejecutó su 1-3-1 en pocos momentos -siempre con Ekperigin en pista- y sin demasiados resultados; algo mejor le fue con la 2-3, que sí mantuvo más tiempo.

El Estudiantes también manejó la defensa por zonas de dos maneras diferentes. En primera instancia, con una 2-3 clásica; y luego, más continuadamente, con la zona mutante donde Jiménez es la punta de lanza defensiva cuando el balón está fuera del 6,25 en la zona frontal y el último hombre bajo el aro cuando el balón alcanza la línea de fondo (el enlace al videoblog de Piti Hurtado lo explica mejor y con detalle).

El acierto en el triple probablemente evitó que el Estudiantes practicara más esta zona. Como reconoció Pepu Hernández al final del encuentro, no se esperaban ese acierto, que en bastantes ocasiones llegó precedido de buena circulación de balón. A la larga, la zona mutante hizo daño al ataque del Gran Canaria, porque empezó a fallar triples claros y no encontró otras respuestas salvo una genial asistencia de Alvarado a Xavi Rey.

También fue interesante cómo cubrió el Gran Canaria la baja de Spencer Nelson, con Javier Beirán de ala-pívot. Driesen sacó partido en dos ocasiones, una en cada tiempo, de su superioridad, cuando la defensa fue individual, pero el Gran Canaria se refugió en la citada 2-3 y tapó esa fuga, aunque de manera global su dominio del rebote defensivo se vio afectado.

Por primera vez en la temporada, creo, el Gran Canaria tuvo dos bases en pista al mismo tiempo. En los últimos 3 minutos, Bellas y Alvarado compartieron cancha para dominar el ritmo del partido y evitar los apuros en la presión rival. En ese periodo, el Gran Canaria sólo anotó una canasta y un tiro libre y permitió canastas fáciles, además de desperdiciar el ataque final en un, a mi juicio, grave error de concentración.

Todo apunta a que el Estudiantes va a seguir sufriendo
Esta temporada he visto bastante al Estudiantes, incluso en vivo contra el Zaragoza. Sus problemas ofensivos son evidentes y más si, como hoy, Granger no aparece como lo venía haciendo. Están buscando a un exterior anotador que reemplace a Antonio Wright, por lo que quizá sea competencia del Gran Canaria en el mercado.

Hay dos cosas del ataque estudiantil que me gustan muy poco: el escaso movimiento de balón -impropio de un equipo de Pepu- y la cantidad de 1x1 sin involucrar a otros jugadores. Sea Flores, Granger o, antes, Wright, es demasiado frecuente ver cómo buscan aislar a un exterior para que decida si penetrar o tirar.

Sigo bastantes blogs de aficionados del Estu y me ha llamado la atención un debate interesante: ¿es conveniente apoyarse de ese modo en Germán Gabriel? Hoy fue el que más daño hizo al Gran Canaria, casi siempre en la pintura, pero la necesidad de trabajarse tanto su tiro hace el ataque aun más lento y resta protagonismo a otros jugadores, además de que, una vez puesto a pivotar, su toma de decisiones es algo dudosa.

Lo mejor
  • El acierto en el tiro. Los 12 triples son el récord de la temporada (empatado con el partido de Valladolid). En el primer tiempo se logró un 7/14 decisivo para conseguir la ventaja de 15 puntos.
  • El buen inicio del equipo, que sin duda dotó de confianza a todos los jugadores, especialmente a los tiradores. Contraste altísimo con los dos últimos partidos disputados en el CID, cuando Lagun Aro y Valencia pasaron por encima de los locales.
  • La alegría en el juego durante algunas fases, las ganas de correr. Óscar Alvarado fue fundamental en conseguir ese espíritu. Y suyos fueron los ánimos al final de un tiempo muerto para mantener ese ritmo: "¡seguimos corriendo, seguimos corriendo!", gritó, imbuido todavía por el espíritu del juego que practica el UB La Palma.
  • El control del ritmo del partido. En el tercer cuarto y la primera fase del último, el Gran Canaria supo mantener el control del juego y evitar las pérdidas de balón tontas. También en este sentido creo que la clarividencia de Óscar Alvarado fue importante. ("Parece que ya tenemos un base", me soltó como frase de saludo mi ex compañero de asiento). Su partido fue muy bueno, atestiguando lo que comentaba el otro día sobre su madurez en la cancha.
  • La defensa sobre Jayson Granger. Todos los jugadores estaban mentalizados de su importancia, por lo que se vio. Se quedó por debajo de los 10 puntos por primera vez en los últimos 6 partidos, su impacto en el encuentro fue escaso pese a que siempre empezó los ataques de su equipo buscando hacer daño con sus penetraciones. 
Lo peor
  • La diferencia final, provocada por la escasa intensidad de los últimos 4 minutos de partido. Al cierre del encuentro se dieron varias canastas fáciles del Estudiantes, mientras el Gran Canaria se olvidaba de atacar con agresividad.
  • Una vez más, la escasa cantidad de tiros libres, síntoma de la falta de agresividad en ataque, de vivir demasiado del tiro exterior. No es sólo que no haya casi 1x1 de espaldas, es que hay muy pocas penetraciones con sentido y con decisión, buscando terminar cerca del aro. Y eso hace el ataque unidimensional y más previsible.
  • El nivel de varios jugadores del Estudiantes, entre ellos, Rodrigo de la Fuente -completamente fuera del partido- y Luis Flores, cuyo esfuerzo defensivo fue inexistente. Cuando alguien cita el nivel de los extracomunitarios del Gran Canaria, siempre cito el ejemplo del Estudiantes, donde el rendimiento de Wight y Flores es muy bajo y su contrato muy alto, a diferencia de los del Gran Canaria.
  • Los problemas para defender a Germán Gabriel en el poste bajo. No pudieron con él ni Palacios ni Savané (cuyo nivel defensivo me parece a años luz de otras temporadas), incluso en una jugada le sacó ventaja a Rey para anotar. No hubo ayudas suficientes ni trabajo previo para evitar que recibiera cerca del aro.

En definitiva, el Gran Canaria apuntó a cierto recuperación y se pudieron entrever indicios de una mejoría en el juego, incluida esa tendencia a correr que lo caracterizó en la racha final del año pasado. Con Xavi Rey -clave para asegurar el rebote defensivo- y Alvarado en cancha, la cosa apunta mejor. A ver si se confirma en próximos encuentros.

1 comentario:

titomartin dijo...

Espero acontecimientos con la recuperación física de green ¿qué debería hacer el granca?
Por otro lado, no me gustó el final de partido de alvarado pues deslució un poco su gran actuación, sobre todo cuando imprimió carácter al equipo. Espero, por su bien y por el del granca, que no se crea que ya ha llegado a la cumbre.