jueves, agosto 13, 2009

Análisis previo de la Selección de Cuba

Con motivo del España-Cuba saldrá de nuevo la publicación Zona basket, dirigida (y escrita casi íntegramente) por Armando Ojeda, en la que colaboré escribiendo una página sobre la selección cubana.

No fue fácil encontrar información sobre los cubanos. Ni siquiera en la web de la FIBA del último campeonato están las alturas o las posiciones de los jugadores de la selección cubana. Además de las estadísticas de esa web y otras búsquedas, encontré un vídeo en youtube sobre el equipo pentacampeón de la liga cubana, el Ciego de Ávila, titulado Estampida (son cinco vídeos en youtube, tras ver el primero de ellos se pueden ver los demás en vídeos relacionados).

El texto lo escribí hace una semana, sin saber la composición de la delegación cubana, así que uno de los jugadores que menciono, Michael Guerra, base titular de la selección y del Ciego de Ávila, no está en la lista.

Una selección en decadencia sin visos de mejora

Hace poco más de 10 años, cuatro de los jugadores titulares de la selección cubana desertaron en Puerto Rico durante un torneo clasificatorio para los Juegos Olímpicos de Sidney. Desde entonces, el baloncesto cubano aún no ha recuperado su nivel, ni tiene visos de hacerlo en el futuro próximo.

Ruperto Herrera, Ángel Caballero, Héctor Pino y Lázaro Borrell decidieron buscar sus opciones de jugar en otros países como baloncestistas profesionales. Seis años antes lo había hecho Andrés Guibert, que al igual que Borrell pasó por la NBA y el baloncesto español.

Su generación había generado ilusión alrededor del baloncesto en Cuba durante la década de los noventa. Tras su deserción, la falta de relevos ha convertido la primera década del siglo XXI en una decepción continua.

La más reciente demostración fue la negativa del combinado caribeño a participar en el Centrobasket de clasificación para el Mundial de Turquía en 2010, debido a que su nivel técnico “no es aceptable”, según el comunicado oficial. Este bajo nivel quedó acreditado, de hecho, en el Torneo del Caribe alebrado en julio de este mismo año, donde las débiles selecciones de Jamaica e Islas Vírgenes la superaron.

Así las cosas, el baloncesto cubano sólo tiene trascendencia dentro de la isla, con una liga de baloncesto interna disputada por ocho equipos. En las últimas cinco ediciones, el Ciego de Ávila se llevó el campeonato. De este club proceden cuatro jugadores –a falta de confirmación oficial de la plantilla- y el entrenador, Daniel Scott. La selección carece de jugadores muy altos, pero sí son muy atléticos. La peor noticia de cara al futuro es que los componentes más importantes superan todos los 27 años y no se vislumbran reemplazos claros entre los jóvenes.

En el juego, el baloncesto cubano se asemeja más al estadounidense que al europeo, por las características físicas y técnicas de sus jugadores; incluso la concepción de los pasos de salida se asemeja al de la NBA.

No he visto jugar a la selección cubana actual, así que los rasgos individuales de sus jugadores los he rescatado de estadísticas oficiales, escritos periodísticos y vídeos de highlights. La indiscutible estrella del equipo es Georffrie Silvestre, mejor jugador de la competición nacional y máximo anotador de su escuadra en el Torneo del Caribe, con más de 21 puntos por partido. Por lo que he podido averiguar, Silvestre es un alero alto (al parecer suele jugar bastante minutos como ala-pívot), que aprovecha su buen físico para anotar principalmente cerca del aro.

La otra principal referencia anotadora es el escolta Alexis Labastida, una amenaza desde los 6,25, que acreditó un espectacular 55,6% en los cinco partidos del Torneo del Caribe lanzando cinco triples por encuentro. Labastida juega algo menos que Allens Jemmott, escolta que también amenaza desde la línea de tres.

En la dirección de juego, uno de los aspectos en los que más déficit presenta la selección cubana históricamente, el peso lo lleva Michael Guerra, el mejor asistente del equipo.

Los dos pívots que más juegan, aparte de Silvestre, son Georvis Elías y Yoan Luis Haití. Ambos combinan juego interior y exterior –llegan a tirar de tres-, pero no tienen la capacidad física ni la movilidad de Silvestre.

1 comentario:

Josué dijo...

Geofrey Silvestre o como ser un agujero negro en ataque, madre mia, bola que le llegaba, bola que se tiraba. 5/20 hizo el chaval en tiros de 2, eso es desparpajo xD

En mi opinion el mejor de Cuba fue Taylor García que se entonó en la segunda parte.

Saludos.