Un partido feo, sin brillantez, con un último cuarto especialmente malo, culminó en el final apretado que parecía, vista la tendencia del Gran Canaria (presente desde la temporada pasada) a no cerrar los partidos cuando se le presenta la oportunidad. Cayó del lado local porque los amarillos continuaron jugando con el freno de mano echado cuando estaban por detrás; porque la última posesión fue extrañísima (yo juraría que le quedaban tiempos a Pedro Martínez, él mismo lo dijo al final...aunque tampoco pareció insistir. Actualización: el propio Martínez reconoce en twitter que no le quedaban y que fue un fallo suyo) y mal jugada, sin valentía para asumir la responsabilidad; y porque este tipo de encuentros suele caer del lado del conjunto más necesitado y que pone más garra, que era el Estudiantes.
Los duelos contra Barcelona y Baskonia, rivales de otra liga, no permitían hacerse una idea clara sobre el nivel del Granca como visitante. Si esta primera versión que vimos contra el Estudiante es cierta, parece que va a ser parecida a la del año pasado, en el que sólo se consiguieron tres victorias a domicilio.
Dejando de lado la debilidad de los últimos minutos, en líneas generales el Gran Canaria me pareció poco atrevido, casi conservador a pesar de que en defensa fue agresivo por momentos. No corrió ni cuando tuvo oportunidad de hacerlo y jugó ataques muy largos siempre que pudo, intentando aprovechar su renta. Pero, al mismo tiempo, tuvo varios problemas para leer el juego y no fue capaz de sacar ventaja de algunos emparejamientos (Bramos con Sergio Sánchez, Wallace con Canner-Medley) ni abundar en los problemas de faltas de jugadores importantes (el propio Niklas o Asselin).
Lo que sí vimos fue una innovación táctica esta temporada con una zona mutante (de 3-2 pasa a 2-3 cuando el balón está por debajo del tiro libre), con Nelson en la parte alta. (Por cierto, un amigo más sabio me contó que antes se llamaban zona Perramón, porque el hombre basculante hacía el mismo movimiento que el famoso portero internacional de balonmano). La zona, en cualquier caso, no pareció romper el ritmo del Estudiantes, porque culminó en dos ocasiones con triples desde la esquina a los que tuvo que llegar Xavi Rey desde muy lejos, y se vio que los jugadores discutían entre ellos sobre su posición en la zona. Supongo que es la dificultad de jugar con tantos americanos, poco acostumbrados a este tipo de defensas. Confiemos en que según avance la temporada se convierta en un arma interesante.
Merece la pena detenerse en los cambios en cómo realizó los cambios hoy Pedro Martínez. Beirán, que llegaba con problemas físicos tras el esguince de tobillo de hace dos semanas, fue el que más jugó (32 minutos), en detrimento de un Moran que únicamente disputó tres minutos. Más habitual fue la rotación de bases, pero Green estuvo bien y acabó jugando 25 minutos. Otro cambio que no entendí: Xavi Rey sustituyó a Savané a falta de 1:14 para el final.
Lo peor
- La debilidad como visitante. No hay manera de sacudirse la idea de que por mucho que tenga ventaja, el Gran Canaria se va a venir abajo, aunque sea frente a un equipo que no se había estrenado. Es muy difícil ganar en la ACB fuera de casa, de eso soy consciente, pero lo peor es que ocurra de esta manera, con esa sensación de padecer fragilidad mental.
- La escasa aportación anotadora cerca del aro. Rey anotó en dos continuaciones muy mal defendidas por el Estudiantes; aparte de eso, de alguna canasta de Wallace, hubo muy pocos puntos logrados en la pintura, a pesar de que en varios momentos hizo daño en el rebote ofensivo. Rey y Wallace tienen que ser mucho más duros en esa área. Esta deficiencia generó que el Gran Canaria dependiera demasiado del triple: con el 6/13 al descanso, parcial 32-37; con el 3/14 del segundo tiempo, parcial de 41-34.
- La sensación de jugar con el freno de mano puesto. Siempre reclamo que el equipo corra más, pero viendo el aplastante dominio en el rebote defensivo (el 83% de los rechaces en aro propio fueron a parar a manos amarillas), tendría que haberse buscado más, entiendo. Parecía claro que Green tenía la orden de no correr. Y no tengo claro que esta plantilla sea la mejor para jugar baloncesto-control.
- Las pérdidas de balón, 19, fueron una constante en el ataque amarillo. El Gran Canaria tuvo 8 posesiones más que el Estudiantes, pero desperdició tantas con esas pérdidas que su eficacia ofensiva fue peor. Algunas de ellas parecieron fruto de la falta de concentración.
Lo mejor
- Por hacer una lectura positiva: si el Gran Canaria es capaz de ir por encima durante 37 minutos, es porque sabe cómo debe jugar para ganar a domicilio y los problemas son más mentales que de juego. Por lo que es de esperar que cuando caiga una victoria fuera se sacudirá algo la ansiedad y será más fácil que lleguen más.
- La aportación colectiva, una vez más. De los nueve jugadores que disputaron más de 10 minutos, ocho anotaron cinco puntos o más y cuatro lanzaron entre 9 y 10 lanzamientos. Sólo Nelson, que tanto había mostrado en los dos últimos partidos, dejó de aportar puntos. Además, ocho jugadores rebotearon y siete dieron al menos una asistencia.
- Me gustó ver la actitud del equipo en los tiempos muertos. En el último, con poco más de 2 segundos por jugarse, no daban el partido por perdido y me pareció que Pedro Martínez explicó las cosas muy claramente ("tienen tiempo de dar dos botes y levantarse, no hay que precipitarse", dijo, más o menos). En uno anterior, el hecho de que hablaran varios jugadores para ajustar lo dicho por el técnico y discutir entre ellos la mejor opción fue un síntoma de que estaban metido en el partido...aunque en algunos momentos no lo pareciera con el balón en juego.
Creo que esta derrota es más importante de lo que parece por un par de razones:
- Era la primera ocasión de ver cómo se desenvolvía el equipo fuera de casa ante un rival semejante. Y puede que genere la ansiedad por ganar a domicilio que ya vimos el año pasado.
- A la vista del nivel actual del rival, era la visita más fácil de lo que queda de primera vuelta. Sevilla y Bilbao son los próximos, difíciles plazas ambas. Y en casa se recibe al Real Madrid.
Así que estaremos atentos a ver si esta primera impresión se acaba confirmando. Esperemos que no, porque alcanzar la Copa con este nivel a domicilio lo veo imposible. Ahí va el vídeo de acb.com:
14 comentarios:
solo pude ver el final, pero sigo notando una falta de profundidad en las jugadas, aunque me dio la impresión de que bellas intentó entrar más a canasta para doblar al pivot.
me veo sin copa este año salvo una reacción importante del equipo
Hola Ruymán. Sólo pude ver algunos momentos del partido, pero me quedo con algunos detalles:
1.- El hecho de que Pedro Martínez no pidiera tiempo muerto en la última jugada ¿a qué se debe, si segundos antes había dicho que lo iba a pedir?
2.- Me da la sensación de que el equipo no sabe afrontar bien ciertos momentos decicivos del partido. El otro día contra Fuenlabrada, aparte de la pájara que tuvieron, la última jugada ofensiva fue un melón de Bellas. Y hoy, cuando el Estudiantes se puso por delante en el marcador, le entró una cierta ansiedad, provocada en gran parte por el atascamiento ofensivo que sufríamos ante la imposibilidad de encontrar a Carrol (lo que tú también has citado en alguna ocasión como Carroldependencia).
Como anécdota, los tiros libres de Jasen. Tira el primero (a meter por supuesto) y se le queda corto, tira el segundo a fallar para agotar el tiempo y al intentar lanzarlo al 2º hierro lo mete a tabla. Como me reí.
Los últimos cinco minutos, más o menos, fueron un despropósito tras otro en ataque. Pero justo la antepenúltima y la última fueron buenas, con decisión y valentía (creo que la penetración de Wallace que saca falta y canasta y el tiro de Carroll a pase de Bellas). Luego llegó la última, en la que Bellas penetra sin un plan definido y Wallace tuvo posibilidad de tirar y no lo hizo para acabar lanzando Beirán en peor posición. Sí, fue una mala jugada.
Lo del tiempo muerto lo explica Pedro Martínez en su twitter: no quedaban tiempos y no se había dado cuenta. (Yo diría que es un tanto benevolente con su equipo técnico, porque estas cosas las suele llevar un ayudante o el delegado, si no me equivoco).
Lo de Jasen fue un despropósito, pero es que antes ya había fallado alguno más importante y debía andar nerviosillo. A lo mejor hubiese sido mejor que fallara el segundo, ya puestos
sensación de controlar el partido, marcando el ritmo, pero sabiendo en todo momento que vas a perder.
De verdad, en 100 caracteres acabas de escribir lo que sería mi crónica si no fuera tan verboso. Tendrías que prodigarte más en twitter :)
jeje, no llego a los 5000 seguidores, por eso no twiteo mucho. Debo estar por... 2 seguidores, de los cuales el 50% son spam.
Oiga, paciencia, eso se va haciendo poco a poco. Hay que perseverar para llegar a ser tan popular como Pedro Martínez.
Todo el partido con el freno de mano echado. Debilidad mental pasmosa para encarar los últimos y cruciales momentos. No recuerdo ganar un partido en balones decisivos a favor del Granca; los que se ganaron siempre fue por fallo del rival. Horrible. ¿Green estaba eliminado por faltas? porque no entiendo que no se juegue los balones importantes con él en cancha y más ayer que las metía. A Bellas le flotan y Green es una amenaza. Me da coraje la falta de mentalidad ganadora. Acabo quemado con este equipo: SIEMPRE IGUAL...
En el foro de acb.com alguno se echa las manos a la cabeza por los minuto jugados por Beiran. Yo creo que no lo hizo del todo mal y por supuesto, aporto mucho mas que el Jim actual.
Perdimos el partido por la mala gestion de Pedro en el ultimo cuarto. No supimos atacar la zona ( nada de balones al palo alto ni penetraciones para dividir la zona ) y creo que hubo errores en las rotaciones.
Va a estar muy crudo ganar un partido como visitante esta temporada.
@Anónimo, creo que Pedro Martínez fue un poco esclavo de su plan de rotación para dejar a Bellas jugando al final; Green lo hizo bien los cinco primeros minutos de cuarto, luego, ya cansado, lo cambió cuando faltaban tres y pico. Y Bellas no estuvo nada bien al final.
@Colegio Galicia, leí en el foro que Moran hizo algún gesto feo y por eso no volvió a salir, pero yo no lo vi. Y Beirán no estuvo mal, pero no creo que por su actuación mereciera tantos minutos, la verdad.
Sobre la zona, se me pasó hablar en la entrada, en parte porque creo que no se atacó especialmente peor que en estático y en parte porque parece un mal tan endémico como la debilidad a domicilio.
Pero fue interesante que en uno de los primeros ataques los comapñeros tuvieron que decirle a Wallace que debía ocupar la bombilla y aun así, al siguiente ataque tampoco lo hizo. Conforme avanzó el partido, todo se fió al lanzamiento triple y la zona promovió que siguiera esa apuesta, que ya se sospechaba infructuosa.
¿que te parece ruyman,que un equipo como power electronics meta 2 puntos en cuarto?
¿hacia donde vamos? ¿son los jugadores y tecnicos conscientes de que son profesionales?
lamentable.
@PACHI, la debilidad a domicilio sí que cansa, sí, aunque yo repito bastantes veces que es algo que le pasa a muchos equipos de la ACB, toso juegan muy fuerte como locales. A ver si la primera victoria fuera llega antes que el año pasado y sirve para aligerar la ansiedad.
@On Off, pues me parece inevitable, tsal como evoluciona física y tácticamente el baloncesto. No creo que sea un problema concreto del Valencia; de hecho, no es la primera vez que pasa, en Euroliga ya había ocurrido, creo, aunque me resultó llamativo que nadie parece saber cuál es la mínima anotación en un cuarto.
Ayer mismo le expliqué a un amigo que la solución de la NBA cuando la anotación bajó (y, lo que más les importa a ellos, las audiencias cayeron en picado) fue cambiar las reglas. Eso hace que los NBA, sobre todos los exteriores, se quejen de la permisividad arbitral cuando juegan con reglas FIBA, aunque parezca mentira.
¿Podría la FIBA, o al menos la ACB o la FEB, promover algo de este estilo? Lo veo difícil, la verdad. Así que no se me ocurre ninguna solución a corto plazo.
Lo malo del aburrimiento y de la poca anotación es que puede inducir al pasotismo y, por ende, a la bajada de interés del baloncesto. Si, encima, la selección va para abajo, pues mal panorama. Es que el razonamiento puede ser lógico. Por ejemplo, ¿cuándo merece la pena ver al Granca por ejemplo? Es claro, cuando juega de local (y a veces). El otro día el Madrid-Lagun Aro fue una pesadilla de partido, no por la diferencia de tanteo sino por lo aburrido del juego...poca riqueza táctica, muchos uno contra uno... Y qué decir del Miami Heat-Washington Wizards!!! 50 minutos jugando uno contra uno permanentemente...MUY ABURRIDO TODO.
@Anónimo, mi opinión probablemente sea un tanto sesgada, porque soy un tanto exagerado en mi gusto por el baloncesto, pero no creo que haya señales alarmantes de decaimiento del nivel de juego.
A mí también me gusta ver equipos que metan muchos puntos, pero no que sea a costa de disminuir la intensidad. De todos modos, las audiencias poco van a variar, dado el punto en el que están cuando no juegan ni Barça ni Madrid; lo único que se puede resentir es la asistencia a los pabellones.
No tengo datos globales de esta temporada, pero viendo los partidos del Granca (dos por la tele y dos en la cancha) sí que parece que está yendo menos gente. Habrá que ver cuántos se enganchan si el equipo va sumando victorias.
Sobre la NBA, yo mismo suelo decir que la temporada regular regala tantos partidos soporíferos, salvados sólo por acciones concretas, casi siempre individuales, que no me interesa demasiado(salvo algunos equipos concretos, quizá). Cuando llegan los play-off sí que me parece un lujo.
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