Impresiones sobre el Basketball without Borders, Darijo Saric, Nenad Miljenovic, Mateusz Ponitka y otros jóvenes jugadores

El fin de semana estuve en el All-Star del Basketball without Borders (BwB), un evento organizado por la NBA que, según creo, es la primera vez que tiene lugar en Europa. Se trata de reunir a los mejores jugadores del Continente menores de 17 años. Y allí estaban todos los proyectos de grandes jugadores de los que se oye hablar cada verano cuando compiten con sus selecciones: el alero croata Darijo Saric, el base/escolta serbio Nenad Miljenovic, el escolta/alero polaco Mateusz Ponitka y otros jugadores destacados, escogidos entre los 50 que tomaron parte en el evento.

Hay mucha gente que los ha visto muchas más veces que yo, así que esto no pretende ser ningún scouting, sólo unos apuntes breves de mis impresiones:

• Lo que más me impresionó es la capacidad atlética de los jugadores. Hasta los de 2,13 se movían con agilidad y rapidez, eran capaces de botar y correr la cancha. Y los más pequeños aguantaban el choque bien, saltaban y eran rapidísimos. Desde luego, cada vez es más difícil llegar a un nivel alto sin cualidades físicas destacadas.

• A Saric lo vi por fibatv.com en dos ocasiones: la semifinal y la final del Europeo sub16 que ganó Croacia (de hecho, podría decir "que ganó él") con tanta suficiencia este verano. Y creo que nunca había cobrado tanto sentido la de "hombre jugando entre niños", porque yo jamás había visto una superioridad tan aplastante en una competición. Claro que no vi a los grandes jugadores europeos de esas edades; pero otros lo comparan con Petrovic. Lo que no le he visto todavía es jugar de espaldas, siempre le he visto encarar el aro desde la línea de tres. En el All Star se le vio cierta apatía, sobre todo al final del encuentro; claro que a esas alturas ya había mostrado que no hay ningún fundamento técnico que se le resista.

• A Miljenovic no lo había visto. En uno de los vídeos de Eurohopes ya se le veía su dribling eléctrico y en los highlights que circulan por Internet se ve su capacidad de pase. Pero es interesante verlo enfrentarse a los mejores de Europa. Más participativo y acaparador de tiros que Saric, no se le ve sacar demasiada ventaja de su rapidez y dribling; al menos, no la suficiente como para resolver con claridad. También es cierto que el partido fue muy alocado y no hubo demasiados contraataques claros, donde probablemente luzca más. Sobre él ya han escrito mucho, así que tampoco me extiendo.

• Me gustó bastante Josep Pérez, el base del Barcelona. Todavía mucho menos formado físicamente que sus compañeros (es del 94, mientras que la mayoría eran del 93), su falta de fuerza y kilos la suple con intensidad y predisposición. Su cara de esfuerzo denotaba que juega al 100% y tiene una cosa muy buena: siempre cierra el rebote y recoge muchos balones sueltos por el suelo cerca del aro. Creo que sólo tiró dos veces, el que menos de los bases casi seguro, y anotó una bonita penetración tras fintar el pase por la espalda. En el Europeo sub17 le vi meter dos triples alucinantes y una canasta espectacular en penetración.

• El otro español en el All-Star, Alejandro Suárez, del Joventut, es un jugador de 2,04 que se mueve entre las posiciones de alero y ala-pívot. Pasó desapercibido en el partido, sin participación de ningún tipo, pero encarna exactamente el prototipo de jugador con un físico tremendo para su edad, muy fibroso y musculado, con buen salto y rapidez. Por cierto, el gran proyecto de la cantera verdinegra actual, Albert Homs, no estuvo en el BwB, pero sí en la final de la Lliga catalana que se disputó a continuación en el Palau Blaugrana, aunque no jugó.

• El mejor del partido fue Piotr Niedzwiedzki, un ala-pívot polaco que parecía más alto de la altura oficial que he encontrado (le dan 2,06, pero yo juraría que rondaba los 2,10; quizá sea un error de apreciación mío por la longitud de sus brazos). Metió canastas de todos los tipos: penetrando con bote, culminando un alley-oop, tras rebote ofensivo, en tiro corto...creo que metió 22 puntos de los 50 de su equipo, con eso se dice todo.

• El otro polaco, nombrado mejor jugador del campus, fue Mateusz Ponitka. En el encuentro creo que anotó 8 puntos, pero dejó destellos de su capacidad de salto en un par de rebotes defensivos, de su intensidad atrás y de un tiro en suspensión muy bien ejecutado. Aunque más pequeño y más explosivo, me acordé de la primera vez que vi jugar a Xavi Rabaseda hace un par de años.

• Del resto me impresionó el ritmo y el dominio del balón de los bases Paulius Semaska, lituano, y Aleks Cvetkovic, serbio. Si me hubiesen dicho de ambos que eran americanos me lo hubiese creído). El sueco Rasmus Larsen, también del 94, dejó patente su versatilidad.