domingo, octubre 30, 2011

Tres motivos para el optimismo grancanario ante la visita del Madrid

Tras un sprint para ponerme al día con las dos últimas victorias del Real Madrid (contra Obradoiro, el fin de semana, y frente al Milán el pasado jueves), creo -o quizá quiero creer- que hay algunos motivos para pensar que el Madrid es asequible, al menos en el CID.

No voy a glosar las bondades del juego merengue, que son muchas, ni me detendré en describir lo atractivo que está siendo su juego por ahora. Sólo voy a comentar tres aspectos de su juego manifiestamente mejorables de los que puede sacar provecho el Gran Canaria:

1) Defensa individual de ciertos jugadores y balance defensivo
Varios de sus jugadores tienen un nivel defensivo bajo. El Madrid practica mayoritariamente una defensa individual que intenta ser bastante activa, sobre todo con Llull y Rudy en pista. Paracuenta con algunos jugadores que no dan el nivel y pierden la concentración atrás con cierta facilidad.

Sergio Rodríguez (aunque está presionando bien a toda cancha), Carroll y Mirotic son demasiado fáciles de rebasar en el 1x1 para un equipo del calibre del Madrid. Con los tres en cancha, la defensa colectiva baja enteros. Especialmente interesante es la debilidad que tiene Mirotic para defender las penetraciones de los interiores contrarios.

Sus pívots, Begic y Tomic, también acusan cierta tendencia a quedarse demasiado cerca del aro en el 2x2.

Asimismo, sus carencias en el balance defensivo fue uno de los aspectos que más explotó el Milán en el primer tiempo.

A priori, es un rival más asequible para el Gran Canaria que un equipo que sea muy buen defensor, porque los insulares hasta el momento concentran sus problemas en la ofensiva, precisamente.

2) Su lectura de juego es mejorable y pueden sufrir sin acierto en el triple
El único encuentro ACB en el que el Real Madrid registró porcentajes de tres por debajo del 35% fue el de Bilbao, donde cosechó su única derrota hasta el momento. Se quedó en un 24% y no supo encontrar los emparejamientos más beneficiosos cuando le faltó fluidez.

Esta carencia en la lectura del juego es propia de un equipo donde sus bases no están brillando en la dirección de juego. Sergio Rodríguez está en el peor nivel de juego que se le recuerda en la liga (su valoración más/menos comparada con la de Llull es paupérrima) y el menorquín sigue jugando igual que el año pasado, cuando actuaba como escolta. Es decir, buscando su tiro como opción principal cuando los sistemas no funcionan y sin capacidad para leer lo que necesita el ataque de su equipo de manera global.

3) Su nivel a domicilio no es igual que en casa y está por ver su rendimiento en partidos a pocos puntos
Hasta el momento, sus dos partidos como visitante se saldaron con victoria por 12 puntos en Valladolid, contra un Blancos de Rueda todavía con muchas dudas y muy poca puntería exterior, y derrota en Bilbao. No parece que haya encontrado el mismo nivel de brillantez que ha mostrado en sus partidos como local; de hecho, en Valladolid necesitó al mejor Rudy y en Bilbao recordó al Real Madrid liviano de la temporada pasada.

En todos sus encuentros ACB, además, ha conseguido más de 80 puntos (promedia 83), por lo que no sabemos cómo va a responder si tiene que jugar un partido con anotación baja. Este será sin duda uno de los objetivos de Pedro Martínez: no permitir el mismo nivel anotador de los madrileños.

Si el Gran Canaria consigue frenar este caudal ofensivo y aprovecha alguna de las otras debilidades comentadas, tiene posibilidades de ganar. Será muy difícil, pero ¿no lo parece todos los años y sin embargo lleva tantas victorias como derrotas en los últimos 10 años?


1 comentario:

On Off dijo...

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