Con unos días de retraso escribo sobre la derrota del Gran Canaria en Badalona (93-76), después de haber forzado ese quinto partido en una épica batalla con prórroga (74-71). Para las crónicas, mejor ceñirse a las de acb.com, tanto en el cuarto partido como en el quinto, porque entre unas cosas y otras, no pude seguir los partidos con la atención que requería.
Sí puedo decir que estos dos encuentros han servido para poner de relieve la importancia y calidad de la afición grancanaria, que incluso se desplazó al aeropuerto a recibir a los jugadores amarillos. El cuarto partido, tras ir 12 puntos abajo en el último cuarto, no se hubiera ganado sin el ánimo del público local, que nunca desfalleció.
Este playoff, el más disputado de cuantos ha jugado el Gran Canaria por el título, ha dejado muchas de esas jugadas que quedan marcadas. El triple de Roberto Guerra desde 9 metros en el último segundo de posesión y los dos tiros libres de Savané en el cuarto partido; las dos canastas de Bennet en el primero; la actuación de Norris en el último cuarto del quinto partido. Ahora me dejo muchas, seguro, pero ha sido un enfrentamiento muy duro, reñido y que podía ganar cualquiera.
Sin duda, para mí esto es lo más importante: el Gran Canaria ha podido ganar el playoff. Por primera vez en su historia, ha estado a un paso de llegar a las semifinales. Es cierto que el marcador del quinto partido fue el más claro, pero también es verdad que hasta el tercer cuarto todo estuvo en el aire y que las faltas de de hombres altos y el mal partido de Hunter hicieron imposible la remontada.
Bueno, esas dos cuestiones y el partidazo de Rudy. Como señaló Malo de Molina, la actuación del escolta verdinegro fue espectacular, lleno de aciertos en decisiones arriesgadas y con una buena defensa de los grancanario. Estuvo sencillamente imparable, igual que lo estuvo Bullock en la Copa del Rey. Otra cuestión es que en esos partidos siempre sean las estrellas rivales las que se salen...
Mi caótica semana tampoco me permite muchos análisis tácticos. La defensa zonal del Gran Canaria ha sido difícil de atacar para el Joventut, cuyas disposiciones defensivas también han puesto en apuros al Gran Canaria. En algunos casos he echado de menos más 1x1 en posiciones interiores. Savané ha atacado a sus defensores intentando aprovechar su rapidez, sin mucho acierto y a cambio de no postear; Vroman tampoco ha sacado mucho provecho de esas posiciones y David ya sólo ataca de cara. Por cierto, aquella última jugada del último cuarto en la que sale botando cuando es defendido por Laviña pudo costar caro.
Ahora empieza esa parte de la temporada llena de especulaciones, rumores, repasos de años de contrato, etc. Esa parte de la temporada en la que el mejor activo del Gran Canaria, Berdi Pérez, pone a trabajar a toda su maquinaria. Permaneceremos atentos.
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