El debut en la Copa ULEB 2007/2008 del Gran Canaria sirvió para demostrar que cuando juega como visitante aún tiene muchas carencias. Los amarillos perdieron en Polonia frente al ASCO Slask Wroclaw (71-63) y empezaron con mal pie la competición europea, a pesar de que este año parecen decididos a disputarla con más ambición que en pasadas temporadas.
Se se repitió, después del encuentro en Valencia, el mal inicio canario (25-14 al final del primer cuarto). Las crónicas del partido hablan de problemas para defender a los norteamericanos del conjunto polaco, de las faltas tempranas de Marcus Norris y Chriss Massie (van varias veces esta temporada) y de que English fue el más acertado del Gran Canaria.
Observando la estadística del partido se aprecia el sempiterno problema de desacierto exterior, con un 5/21 en triples que se queda en 1/17 si quitamos la aportación de English. Especialmente extraño es el 0/4 de Mario Bruno Fernández, siempre tan comedido a la hora de tirar.
Llama la atención la participación de Freeland, que jugó 20 minutos. Baldo fue el quinto pívot esta vez y sólo estuvo en cancha 17 segundos. El inglés estuvo aplicado en tareas menos vistosas (4 rebotes y 4 robos), tal como parece pedirle Maldonado. Su valoración final fue de 9 puntos.
Hay suficiente experiencia en esta liga como para saber que el margen de reacción es poco y que no vale con amarrar sólo los encuentros de casa, se necesitan trinufos fuera para pasar de fase.
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