Concurso de triples
Entre los dos partidos se celebró, a toda velocidad, un concurso por eliminación, donde cada triple valía un punto salvo si era anotado desde tres lugares determinados, algo más alejados de los 6,25, en cuyo caso valía dos puntos.
Como en todo el torneo, el claro dominador fue Danny Brown, el único capaz de pasar de 13 puntos en todas las rondas. En la final batió al base canario Ángel Gallego, que superó por poco -y en una ronda extra para desempatar- a Diego Quintana, otro de los favoritos a la vista de lo sucedido en los partidos. El récord en una ronda lo alcanzó el propio Brown, con 19 puntos; Qunitana llegó a los 16 en la segunda ronda.
Galardones individuales
Tras los dos partidos, con Point One coronándose como vencedor absoluto del torneo, se procedió a la entrega de lso galardones individuales. Rafael Calvo, organizador principal del evento, presentó y entregó los premios:
- Máximo anotador: Danny Brown, con un promedio anotador de 34 puntos. Aunque bajó su anotación confirme avanzaba el campeonato (38 el primer día, 33 el segundo y 31 para cerrar el torneo), sus porcentajes han sido muy buenos de tres: 15/34, un 44,12%, muy alto para promediar cerca de 12 lanzamientos triples por encuentro. También estuvo muy bien en tiros libres (21/26), un 80,77%.
- Máximo reboteador: Sergei Krasavtsev, absoluto dominador de la zona propia, muy firme y seguro. Fue de menos a más en la captura de rechaces: 12 el primer día, 15 el segundo y 19 en el decisivo. Su promedio ha sido, por tanto, de 15,3 rebotes. Ha jugado más de 32 minutos en los tres encuentros, lo que también ha contribuido a sus registros.
- Mejor pasador: Ulises Déniz, con 18 asistencias en total, 6 como promedio. Supo mover a su equipo y sumó pases de canasta tanto en estático, interpretando muy bien el 2x2, como en contraataque, a pesar de que la línea exterior de su equipo era la menos atlética.
- Mejor jugador (MVP): Danny Brown, sin duda alguna. Muy superior al resto en todos los partidos, consiguió que su equipo ganara el torneo pese a la derrota del primer día y se fajó en defensa. Su habilidad en el tiro es muy alta, encesta con defensores delantes gracias a su salto, y sus condiciones físicas también son de primer orden. El galardón esta muy claro.
La organización no eligió a un cinco ideal, así que esto es mi valoración subjetiva tras ver todos los partidos. No me extenderé en las características de los jugadores, eso lo dejo para la entrada posterior con el citado scouting, sólo justificaré mi elección.
- Base: Ulises Déniz. Aparte de ser el mejor pasador, fue el que mejores decisiones tomó para su equipo, buscando a los interiores Schafer o Anglickis, y tomando responsabilidades ofensivas cuando no encontraba soluciones, aunque con irregular acierto -mal en los triples, mejor en las suspensiones y penetraciones. Es un base puro, quizá el más claro del torneo, y se nota en ataque y en defensa. Sus promedios: 11 puntos (7/16 de dos, 4/18 de tres), 5,3 rebotes, 6 asistencias, 3 pérdidas -pocas, teniendo en cuenta que siempre arriesga buscando el contraataque y que jugó mucho tiempo y acaparó mucho el balón- y 13,3 de valoración. El último partido, en la única derrota de su equipo, estuvo algo más apagado, probablemente por el cansancio, ya que disputó alrededor de 38 minutos de media.
- Escolta: Anthony Davis. Sus promedios: 20 puntos, 5 rebotes, 3,3 recuperaciones, 1,6 asistencias, 3,3 pérdidas, 17,7 de valoración. Su 4/13 desde 6,25 demuestra que el tiro lejano no es de sus mejores cualidades, pero ha convertido varias suspensiones de 5 metros con defensores encimas. En cualquier caso, con sus penetraciones y rebotes ofensivos aprovechando su poderío físico -y a pesar de sus 1,88 metros- se convirtió en la principal referencia de su equipo, que, por otra parte, era el peor del torneo, como demostró el hecho de que perdieran los tres partidos, el último de ellos por 30 puntos.
- Alero: Danny Brown, acaparador de premios (mejor jugador del torneo, máximo anotador, vencedor del concurso de triples). Realmente puede jugar de escolta, pero ha jugado bastante tiempo de alero aprovechando su físico. 34 puntos de media, con 44,12% en triples y 80,77% en tiros libres (algo peor de dos, 18/38, un 47,4%). Además, 2,3 asistencias, 5,7 rebotes, 4 recuperaciones y más de 5 faltas recibidas por partido; un increíble 33,3 de valoración media. Su equipo perdió el primer partido a pesar de su exhibición (38 puntos en 32 minutos), posiblemente porque él se lesionó con algo más de minuto y medio por disputarse.
- Ala-pívot: Sergei Krasavtsev, que aunque realmente es un pívot puro, ocupa esta posición para dejar espacio a Schafer en el puesto de pívot. Tuve dudas sobre si elegir a Tay Ogedengbe, un cuatro más claro, pero creo que la importancia de Krasavtsev y Schafer en el torneo ha sido más importante. Su fortaleza en la pintura permitió a su equipo correr mucho. El pívot ruso ha promediado 16,7 puntos, 15,3 rebotes, 1 recuperación para 18,3 de valoración. Jugó mucho tiempo. De su duelo con Freeland saltaron chispas, y Schafer seguro que también se acordará de él por su dureza.
- Pívot: Ray Schafer. Igual que Déniz, vio mermado su rendimiento en el último encuentro, razón fundamental para la derrota de su equipo. Sus recursos ofensivos son variados, termina con cierta facilidad cerca de la canasta y siempre que puede hace un mate. Promedió 20,3 puntos, con muy buenos porcentajes (28/40, un espectacular 70% en tiros de dos), 9,3 rebotes, 1 tapón, con 23,3 de valoración. Por poner una pega a su juego: siendo tan poderoso en la pintura, fuerza muchas faltas (5,3 de promedio) pero saca poco rendimiento de ellas (5 de 18 en tiros libres, un pobre 27,8%).
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