La mayoría del público aplaudió al equipo local al acabar el partido. La sensación general parecía decir: "Se hizo lo que se pudo, está claro que el Real Madrid no juega en la misma liga". Yo mismo pensé que, efectivamente, este Real Madrid actual es difícil de alcanzar. Pero también creo que Pedro Martínez tiene toda la razón en sus declaraciones. De hecho, las leí y me parecieron tan preclaras, que las copio, porque yo no lo podría expresar mejor: "cuando no ganas [al Real Madrid], puedes caer en relamerte las heridas, en decir 'bueno, se ha llegado a la prórroga con el equipazo que tienen', estamos en el buen camino, etc. Y eso es sinónimo de no mentalizarte bien para el próximo partido. Preferiría que afrontáramos el próximo partido pensando en que hemos perdido un encuentro que no tendríamos que haber perdido y que salgamos con rabia a salir pensando que lo tuvimos en nuestra mano ante el Real Madrid."
Ese incorfomismo, esa mentalidad, la fortaleza defensiva de que hace gala el Gran Canaria en casa y otros buenos detalles son los que me hacen ser optimista para el futuro, incluso para la doble cita vasca de esta semana.
El partido contra el Real Madrid estuvo muy bien planteado. La defensa grancanaria maniató a Bullock, no dejó que Garbajosa dañara desde fuera o en penetraciones (poniendo en duda, por cierto, lo del daño de los ala-pívots que juegan por fuera), minimizó el impacto de Llull y Kaukenas en el encuentro, y no dejó que Vidal se luciera en el contraataque. Sin embargo, son jugadores de tanta calidad que cada uno fue capaz de aportar alguna acción positiva, de sumar, y eso fue fundamental en la victoria, quizá más que la puntería de Hansen o la clase de Lavrinovic y la calidad para moverse sin balón de Veljckovic (quien, por cierto, cada vez que lo veo jugar me parece mejor).
Con todo, el Gran Canaria tuvo el partido en su mano: siete puntos de ventaja mediado el tercer cuarto. Pero dejó de anotar, una vez más (ya perdió ventajas tras el descanso contra Joventut y Barcelona), y recibió un parcial 0-12 (de 42-35 a 42-47) que yo pensé que sería definitivo. Pero no fue así: los de Pedro Martínez volvieron a ponerse por delante e hicieron al Real Madrid sudar cada canasta. El 12-12 del último cuarto es revelador. De hecho, los 62 puntos que anotó el Real Madrid son su peor cifra de la temporada. En la prórroga, sin gasolina para defender en el bando local, anotaron casi lo mismo (11 puntos) en sólo cinco minutos.
Al menos, la última canasta de Savané dejó la diferencia en 6, porque podría haber sido mayor a la vista de cómo se desarrolló el tiempo extra. Y esa diferencia no es baladí, porque va a ser un factor fundamental en la resolución de las plazas para la Copa. Está claro que hubiesen sido mejor los dos puntos del 60-62 antes de la última jugada y arriesgarse con un triple, como el propio entrenador del Gran Canaria aclaró (él mandó a buscar el tiro desde 6,25), pero el Real Madrid tapó bien esa posibilidad -aunque viendo la repetición yo hubiese buscado a Carroll a la derecha de Norris, aun con Llull encima- y Savané consiguió, en un tiro difícil, el empate. A priori, el equipo que llega por detrás tiene ventaja moral; además, jugaba en casa y algunos jugadores del Madrid tenían problemas de faltas...pero fue mucha carga física para el Gran Canaria y no hay otro base en Europa -y no sé si en el Mundo- como Prigioni para controlar una renta en el marcador.
Lo peor
- La aportación ofensiva de los exteriores, reflejada en los puntos y los porcentajes de acierto desde 6,25. Hay quien alaba a Sanders, que está claro que tenía un día mejor que en otras ocasiones, pero lo cierto es que en el último cuarto no metió ningún punto al fallar los dos tiros que intentó. Entre los bases y aleros, dejando de lado a Jaycee Carroll, sumaron 16 puntos, 11 de los cuales fueron del citado Sanders. Y entre todo el equipo, 25% en triples, 5/20.
- La incapacidad para forzar faltas y sacar tiros libres. En la jugada final, el Madrid pudo cortar el tiempo de ataque gracias a que todavía no había alcanzado las cuatro faltas. Con siete jornadas disputadas, el Gran Canaria es el equipo que menos tiros libres ha lanzado de la competición (y eso que Gipuzkoa Basket y Bilbao tienen un partido menos), con 88. Es decir, 12,57 por partido. El promedio en la ACB es de 18,37, casi una cuarta parte más de lo que logra el Gran Canaria, que en porcentaje (77,27%) está algo por encima de la media (76,02%). Son cuatro puntos menos por partido desde los 4,60 metros respecto al promedio de la competición. Está claro que los aleros del Gran Canaria no son grandes penetradores y que basan gran parte de su juego en su tiro, pero tienen que conseguir combinar ambas facetas. El ejemplo paradigmático es Sanders, quien no ha lanzado ningún tiro libre aún. Ya el año pasado lanzó algo menos de uno por encuentro, pero ya van siete jornadas de la actual y todavía no se ha estrenado. Norris, Bellas, Fisher y Kickert tampoco llegan a un tiro libre de media por partido. En definitiva: el Granca debe ser más agresivo e inteligente en ataque, conseguir forzar faltas para sumar de maneras diversas cuando el ataque esté más trabado.
- La diferencia de rendimiento en las parejas de pívots. McDonald y Kickert están a años luz ahora mismo de Augustine y Savané en ataque y, sobre todo, en defensa. En el último cuarto, las faltas de Augustine y una pequeña lesión de Savané hicieron que Pedro Martínez echara mano de nuevo de los pívots ayer suplentes, que estaba claro que no tenían su día. Y eso lo notó el equipo, sobre todo atrás. De hecho, seguro que el técnico pensó -quizá por primera vez en el año- que un quinto jugador interior le hubiese venido bien. Probablemente ese papel lo jugará Ryan Richards cuando McDonald jure la Constitución Española, que al parecer será dentro de poco.
- La defensa, sin duda alguna. Es muy difícil defender al Real Madrid, con tanto talento y posibilidad, con jugadores que pasan tan bien y con la variedad ofensiva con la que juegan. El Gran Canaria lo hizo y estuvo a punto de llevarse la victoria gracias a eso. Con Kickert y McDonald hubo algún despiste más, y Sanders concedió un tiro adicional para un 2+1 y permitió una canasta fácil de Veljckovic, dos jugadas que al final fueron importantes...pero está claro que no se puede defender a ese nivel de modo tan constante, sobre todo con jugadores que se mueven tanto como los del equipo blanco. En cualquier caso, el Madrid sudó mucho para anotar y sin los arranques de talento individuales no hubiese ganado.
- La capacidad de competir del Gran Canaria. Forzar una prórroga al Real Madrid es lo más cerca que ha estado cualquier equipo de ganar a los de Messina. Todavía sigue vigente lo que apunté tras la derrota en Vitoria: en las derrotas, el Gran Canaria siempre ha competido hasta los últimos minutos. Aun así, considero que tiene razón Pedro Martínez: era un partido para ganar, y eso puede que pese al final de liga o a mediados, cuando se otorgen las plazas para la Copa del Rey.
- Sitapha Savané. Lo destaco individualmente porque no lo había hecho hgasta ahora, pero es que este año, en todos los encuentros que he visto, no ha hecho ni un sólo partido malo. A veces no destaca tanto estadísticamente como contra el Real Madrid (16 puntos, 7 rebotes, 5 asistencias, 24 de valoración), pero aun así su participación es fundamental en este equipo, especialmente en defensa. La combinación con Augustine le va de maravilla, porque éste es capaz de defender a jugadores más altos y Savané se queda con los más duros, que difícilmente lo superan por fuerza. Y sigue ejerciendo de líder en la cancha y fuera de ella.
El vídeo de acbtv.com, para el que quiera mortificarse:
10 comentarios:
Parece que en Canarias también habéis contraído el virus nacionalista, ese que os obliga a hablar de Estados y no de naciones para que la senbilidad territorial no se irrite. 30% de paro + nacionalismo = felicidad completa.
Lo peor, la falta de respeto de los árbitros. Amenazaron de técnica a Pedro, Moran y Bellas.
No a Garbajosa, Travis H. ni Messina.
Un campo atrás cuando recibe Prigioni en el aire sin pisar en campo del granca hizo que los árbitros se miraran disimuladamente. (si no estoy equivocado con el reglamento)
Velikovic a demás de ser un fenómeno, le permiten defender muy duro sin recibir faltas. Se pasó todo el partido con ayudas defensivas ilegales (sobre todo a carrol) y solo pitaron falta cuando ya estaba resuelto el partido.
Me gustó el partido de Bellas, a ver si puede progresar con el tiro a lo largo de la temporada.
Savane marca la diferencia.
La superioridad física de Will la interpretaron los árbitros como ilegal. y si no lo dejan jugar intenso pues se diluye.
¿como va la serie de 3 de Kicker?
@On Off: ya vi tu comentario en la otra entrada. Yo también protesté en el CID, pero la verdad es que no creo que influyeran. De hecho, firmaría ahora mismo que pitaran así siempre contra los grandes, ha habidos actuaciones arbitrales mucho peores, en mi opinión.
Y lo de las protestas es cierto, pero no me gusta nada decir que el arbitraje es malo porque no pitan técnica. Yo creo que no deberían pitarla nunca (a no ser que haya sangre, jeje), ni a unos ni a otros.
El reglamento cambió este año con el campo atrás, ahora es un poco menos estricto.
A mí Bellas no me gustó muchoen ataque. Se comió una entrada por ir a lo loco, tiró una pedrada en un tiro a final de posesión en el que estaba bien posicionado... no sé, todavía le queda progresión para soltarse en la dirección de juego.
Kickert ya va por 0/9 en triples este año. Al final del 2º cuarto falló uno completamente solo, con espacio y tiempo para tirar. A ver si mete el primero y coge confianza.
@Anónimo: normalmente no respondo a cosas que no son baloncesto, pero me hizo tanta gracia que no me pude reprimir. Es un contrasentido absoluto decir que el virus nacionalista se refleja en hablar de estados y no de naciones. Precisamente es la idea de representar a una nación la que origina un nacinalismo. Aparte de eso, pensar que en Canarias hemos contraído ese supuesto virus por el escrito de alguien sobre baloncesto es todavía más gracioso cuando hace 15 años (más o menos) que el presidente autonómico esde un partido que sí se autoproclama nacionalista.
Y, bueno, por dar algún apunte personal, en el 30% del paro me incluyo, pero en el nacionalismo no (ni siquiera en el nacionalismo español en el que pareces militar tú), así que mi felicidad no es completa todavía. Si acaso, el mío puede definirse como nacionalismo isletero.
no sabia ruyman, que cooperabas con psiquiatras sin fronteras...
Jeje, no creo que el responsable de ese comentario se dejara, seguro que le gustaría saber dónde ponen la frontera los psiquiatras antes de acudir a consulta..
@Pachi: Gracias por los comentarios. Lo del paro no tiene mayor importancia, estoy estudiando y era difícil compatibilizar ambas cosas. Si me quedo sin oportunidades, siempre puedo pedir una colaboración extra a mis estimados contertulios del blog, jeje.
Los del 4 no iba sólo por ti, ni mucho menos, lo opina mucha gente. A ver si encuentro tiempo para indagar más en las estadísticas de los últimos años.
Yo no soy tan negativo con Kickert. Ha hecho algunos partidos buenos y este año es más duro en el rebote. Su lentitud y su escasa mentalidad defensiva (siempre llega tarde a las ayudas...cuanod va) no se le va a curar nunca, pero al menos está más fuerte y se atreve a jugar más cerca del aro en ataque. Y lo de los tiros son rachas malas que les pasan a todos los jugadores. Ya entrarán, seguro. Yo creo que su nivel físico y su talento está en el límite entre LEB y ACB, pero tiene buena actitud y es inteligente para entender sus limitaciones, algo que otros jugadores con mejor físico -léase Moncasi- no tienen.
lo que dice pachi con respecto a los árbitros es cierto. De hecho creo que la influencia de los árbitros fue determinante, decisiva. Contra el barsa pudimos ver como era falta cada entrada de navarro pero es que aquí el Madrid hizo innumerables faltas en su defensa. Lo que me hace pensar que en europa tendrán problemas cuando no tengan esta protección arbitral.
Creo que sé a qué jugadas te refieres, y la falta de energía y capacidad atlética se demostró en ambas. Kickert ha demostrado irregularidad, con más valles que picos en su rendimiento hasta ahora, está claro. Yo creo que es un jugador aprovechable para ciertos momentos y, sobre todo, contra ciertos equipos, y precisamente hasta ahora se ha enfrentado a los que peor le vienen. Cuando juegue contra ala-pívots de inferior calidad seguro que mejorará; el año pasado ya hizo algunos partidos buenos.
En suma: básicamente estamos de acuerdo, tu concepto de Kickert seguro que es un poco peor, pero veo algo injusto medir su rendimiento con siete jornadas entre las que se incluye a cuatro de los cinco equipos más poderosos de la competición.
En lo que no estoy de acuerdo es en que su rendimiento será crucial para el Granca. Yo creo que es mucho más importante el de McDonald, porque la rotación de tres pívots y 10-15 minutos para Kickert puede durar toda la temporada, pero si McDonald no mejora y se exprime a Augustine y Savané tanto como contra el Madrid, la situación será complicada.
Jeje, recuerdo que cuando lo entrevistamos en Zona Granca se sorprendió un poco cuando Armando Ojeda le dijo lo de AC/DC; creo que dijo algo así como "sí, me gusta, pero como otros muchos". Creo que salió en Canarias7 o algo así y de ahí se le quedó la idea a Armando, pero no sé si fue más una impresión mía que la realidad.
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