La sensación al concluir el encuentro, y ante el rumbo que había tomado este, era que el Gran Canaria debía haber pasado menos apuros. A cinco minutos del final, estaba siete puntos arriba (64-57); pero en los últimos 30 segundos tuvo dos tiros para empatar: primero Felipe Reyes (con 70-68) desde una posición desde la que acaba de anotar dos tiros; y luego un triple de Louis Bullock, con 71-68, a ocho segundos del final.
Pero esa sensación es engañosa. El Real Madrid no juega bien, depende mucho de Bullock y Reyes, como decía en el análisis previo, pero nunca baja los brazos y lucha siempre por los partidos. De hecho, llevaba una sola derrota en los últimos 12 partidos ACB (y fue contra el Barcelona en el Palau). El Gran Canaria puede decir con orgullo que venció a los blancos de una manera similar a la que lo hizo Olympiakos en Euroliga.
En el plano táctico, hubo menos sorpresas de las esperadas. El Real Madrid sólo empleó la zona 2-3 que le ha llevado a muchas remontadas al final del partido, durante poco tiempo y en momentos concretos, y no tuvo mucha incidencia en el juego. El Gran Canaria también usó la 1-2-2 (o 3-2) durante un par de ataques blancos, pero de manera casi anecdótica.
Para mí, la clave fue la recuperación del mejor nivel defensivo amarillo. El Real Madrid se quedó en 15 puntos en el segundo y tercer cuartos, y los 17 del primero llegaron gracias a dos contraataques tras pérdidas locales. En el último, sumó más gracias al arreón de coraje y talento de Reyes y Bullock, muy difíciles de defender para cualquier equipo europeo. Maldonado elogió la defensa sobre Raúl López y de los exteriores en general durante la primera parte y de los interiors en la segunda, pero no personalizó. A mí me gustaría detenerme en Savané y Augustine. Creo que en defensa colectiva, son de los mejores pívots de la liga, con todo lo que eso conlleva. El balón que el norteamericano le robó a López para acabar en mate me pareció un ejemplo de inteligencia y anticipación. Y la intensidad y dureza de Savané difícil de igualar.
Ahora, Real Madrid y Unicaja están a un partido (aunque con empate a victorias, ambos quedarán por encima del Gran Canaria por la diferencia de puntos) y el Joventut está igualado pero le queda visitar el CID, por lo que es obligado mirar hacia arriba. Es un objetivo muy difícil, pero el hecho de que los grancanarios estén disputando esa plaza con los equipos que han jugado Euroliga este año debe considerarse como un hecho histórico.
Por cierto, fue la victoria número 100 de Maldonado con el Gran Canaria (y casualmente, su partido 300 en ACB). En la rueda de prensa, el técnico dijo que eso significaba que también Norris llevaba ese número de triunfos. Savané cumplía 200 partidos en la liga, de los que 170 han sido vistiendo la camiseta amarilla (los otros 30 fueron con el Tenerife).
Lo mejor
- La intensidad y concentración, sobre todo en defensa. El Real Madrid perdió 18 balones (suele perder sólo 14) y tuvo un porcentaje en triples del 23% cuando promedia un 36%. Bien es cierto que Hervelle falló dos completamente solo y que Tomas registró un 1/5 errando algunos que no son habituales.
- La aportación colectiva en ataque. Con English flojo y mermado por las faltas, el resto se repartió el trabajo ofensivo. Moran sigue atreviéndose más desde la Copa, Sanders contribuye con puntos aunque no esté fino, como fue el caso, Freeland volvió a demostrar su capacidad para el 1x1 de espaldas y Savané fue el puntal ofensivo al final del partido con tres canastas de mucho mérito.
- La importancia de la 'vieja guardia' grancanaria. Moran, Savané y Norris fueron importantísimos. El senegalés fue el más valorado del encuentor, con 19 (14 puntos y 7 rebotes); Moran fue el que mejor valoración más/menos registró (22) y Norris supo controlar muy bien el encuentro cuando peor se puso. Su +14 en valoración más/menos atestigua su aportación. Son los tres que más tiempo llevan en la isla y todos acaban contrato esta temporada.
- Permitir la remontada visitante dos veces. Con 54-42 en el minuto 27 tras una técnica a Hervelle, el Gran Canaria estuvo cuatro minutos sin anotar y el Real Madrid se acercó hasta ponerse a tres (54-51); más tarde, del 64-57 se pasó al 64-62 justo en los momentos importantes.
- El escaso control del rebote defensivo amarillo. Está claro que el Madrid es el mejor equipo de la liga en ese apartado, pero normalmente el Gran Canaria recoge el 80% de los rebotes en su aro y en este caso se quedó en el 55%. Eso impide correr y anotar canastas fáciles y obliga a atacar con la defensa blanca formada, con la dureza que ésta suele tener.
- El juego del Real Madrid, su ansiedad y sus malos modos. Desde que hace dos años ganaron liga y Copa ULEB, apostaron por un equipo de lucha y garra donde Bullock y Raúl López son los únicos que ponen clase. Pero su juego es cada vez peor, su circulación de balón es muy deficitaria y parecen desquiciados siempre que van perdiendo. Les pitaron dos técnicas completamente justificadas después de acciones claras. Y Joan Plaza contribuye al encrispamiento con sus protestas continuas. A mí me parece un equipo completamente diferente al que se llevó la liga 2006/2007 -y que ganó en la isla de modo brillante- con una primera vuelta espectacular por juego y resultados.
4 comentarios:
Tremendo el equipo, que concentración.
Los bases madrileños nos habían machacado en los últimos partidos, y se ve que Norris y Mario salieron mas metidos. A Daniel K. lo han crucificado definitivamente. La gente le tiene especial manía al australiano. Esperemos que no le afecte el partido que hizo ya que le necesitamos.
El Madrid patético, y Plaza con sus pataletas da una imagen lamentable.
Como me gusta Kennedy Winston! Me imagino ese hombre ahora en el Granca.
Saludos.
Coincido contigo en todo...salvo en lo de Winston. Me sigue pareciendo un jugador demasiado frío.
El viernes, en el programa de radio, entrevistamos a Savané (ya escribiré algo) y nos dijo que le parecía un muy buen jugador, que en los entrenamientos lo veían hacer cosas tremendas con mucha facilidad, pero que aún era muy joven. Cuando le dije que un equipo como el Madrid todavía no le venía bien, Savané respondió que ahora sí era un jugador más para el Gran Canaria. Le animé a que lo invitara a venir de nuevo el domingo...pero supongo que no estaría para muchas bromas.
Por cierto, el recibimiento que tuvo fue como cualquier otro miembro de la plantilla madridista.
Si, el colegilla que se sienta junto a mi ni se había enterado de que Winston jugó aquí.
Igual me pasó con Udoka. Cuando toco el primer balón, y sobre todo cuando defendió la primera jugada me gustó mucho. Creo que yo era al único que le gustaba Udoka. Al final, el anillo NBA que ganó siendo un jugador importante demuestra que no estoy tan loco.
Se me olvidó el programa de radio!!!!
Hace tiempo mandé un mensaje al club para que cuelguen los programas en la red y poder escucharlos en cualquier momento.
Hombre, Udoka tenía bastantes virtudes, pero aquí registró un 32% de tres. Lo que les ocurrió a él y a Winston es que se esperaba que fueran la principal vía de anotación exterior. Udoka no creo que fuera el adecuado para esa función -creo que es más un jugador de complemento- y Winston no tenía la madurez suficiente.
Sé que el club tiene algunas cuestiones pendientes de la web y los programas ocupan bastante espacio, así que no sé si darán curso a tu petición. Pero si quieres la parte de la entrevista a Savané, te la puedo enviar por email, sólo que pesa unos 5 Mb.
Publicar un comentario